Opinion

LIVIANITOS LIVIANITOS

EDITORIAL

A través de la historia institucional del país, el departamento de Caldas siempre ha ocupado lugar privilegiado, sobre todo en el parlamento colombiano.

Grandes hombres han brillado con luz propia a nivel nacional, y su pensamiento fue faro que guio grandes corrientes de opinión en el país. Aquilino Villegas, Gilberto Alzate Avendaño, Silvio Villegas, Fernando Londoño y Londoño, José Restrepo Restrepo, Alberto Mendoza Hoyos, entre otros.

También hubo dirigentes que, aunque sin tanto brillo ideológico, sus voces fueron escuchadas, respetadas y acatadas en el parlamento durante varias décadas como Víctor Renán Barco, Luis Guillermo Giraldo, Omar Yepes Alzate y Rodrigo Marín Bernal. Luego vinieron otros con fugaces pasos por el Congreso de la república cuya influencia era más regional que nacional.

Era normal que en todos los gabinetes del gobierno de turno, estuviese mínimo un caldense, lo mismo que en las mesas directivas del Senado y de la Cámara.

Todo indica que este cuatrienio se irá en blanco para los ahora dirigentes caldenses. En el caso del gobierno nacional, dicen que el presidente Iván Duque, al igual que Diógenes con su lámpara, no encontró un hijo de esta tierra con las calidades y capacidades que lo hicieran digno de hacer parte de su gabinete. Solo fueron importantes para aportarle votos.

En el parlamento, nos tendremos que conformar con las presidencias de comisión obtenidas por los senadores Mario Castaño y Carlos Felipe Mejía durante la legislatura que terminó el pasado 20 de julio; y con la vocería del partido conservador ante la cámara de representantes de Félix Chica, lo que en la práctica es caramelo para niño de cinco años.

Caldas no tiene dirigentes con peso específico en lo nacional. Son livianitos, pesos ligeros, cuya injerencia de algunos, se limita al ámbito departamental para administrar sus parcelas electorales. Quienes no disfrutan del ponqué burocrático de Luis Carlos, tratan de arañar la mermelada nacional, seguramente por ello el senador Mario Castaño amplió sus linderos al Quindío para ser el referente del Eje Cafetero.

Un departamento con una dirigencia parlamentaria que solo acude al alto gobierno para pelear cuotas burocráticas no puede progresar.

Pensilvania, 16 agosto 2020.

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