Opinion

REACTIVACIÓN ECONÓMICA

Por: Juana Carolina Londoño – Abogada especialista en derecho comercial y legislación financiera y gerencia de entidades territoriales.  Trabajó como asesora jurídica del Instituto de Seguros Sociales, Central de Inversiones S. A., concejal de Manizales, representante a la Cámara, Presidente de Fiducoldex y actualmente empresaria: Londoño Asociados.

En momentos de crisis como el que vivimos actualmente muchos gobiernos comienzan a hablar de reactivación económica, algunos de manera acertada, con fundamento y estrategias claras para poner a funcionar el aparato productivo y dinamizar la economía, otros, en forma intuitiva y sin tener claro cuál es el rumbo que hay que seguir.

La verdad es que hoy nos encontramos afrontando la más drástica contracción de la economía mundial y la peor recesión desde la segunda guerra mundial, generando un impacto en la producción, cadena de suministro, afectando los indicadores sociales, estancando el consumo y llevando al cierre de muchas empresas.

La tasa de desempleo en Colombia alcanzó máximos históricos en mayo del 21,4%., se perdieron cerca de 5 millones de puestos de trabajo en todo el país y la pérdida de ingresos de los hogares podría alcanzar los $16,7 billones.  Esta crisis podría llevar a la pobreza de nuevo a 7,3 millones de personas de poblaciones muy vulnerables.

El gobierno Nacional ha centrado su estrategia de reactivación económica en la vivienda, el agro y construcción de infraestructura en torno a las app y concesiones.

En materia de vivienda la meta al 2022 será generar 300 mil nuevos puestos de trabajo directos y 420 mil indirectos en la cadena de valor, 500 mil viviendas formales nuevas. Es urgente la construcción de más vías terciarias donde CONECTEMOS LA COLOMBIA RURAL, carreteras terciarias que conecten las veredas con las zonas rurales mejorando condiciones de trabajo y vida enfocados en el empleo. La falta de carreteras adecuadas encarece el producto.

La apuesta en el sector rural es por la capacitación tecnológica y asistencia técnica agropecuaria por medios digitales, inversión en sistemas de riego que garanticen la competitividad, 1.5 billones para créditos y apoyo a las pequeñas asociaciones para la comercialización de los productos.

Caldas se encuentra en la senda correcta de reactivación de su economía con programas solidos en materia agropecuaria, ejecución de grandes proyectos de infraestructura y vivienda los cuales generaran dinamismo inmediato a la economía de la región.

Recordemos que lo único que reactiva verdaderamente la economía es el empleo, y es, asimismo, la mejor forma de proteger una familia. El empleo tiene que ser un propósito nacional y local. En esa materia hay que ser osados y creativos.

Manizales, 16 agosto de 2020.

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