Opinion

YA LO SABÍAMOS

EDITORIAL

En oportunidad anterior hablamos sobre la cantidad de información y desinformación transmitida a través de los medios de comunicación y redes sociales sobre el coronavirus covid-19. Todo indica que, así como en la guerra, la verdad es la primera sacrificada.

Los boletines de prensa sobre contagiados y víctimas publicados diariamente por diferentes autoridades de salud, están plagados de inexactitudes, levemente inflados, y se dice que estas cifras y estadísticas, en algunos casos, son utilizadas para generar miedo y causar pánico. Hay polos opuestos: la alharaca de doña Claudia López en Bogotá y la mesura de Daniel Quintero en Medellín.

Este virus es una realidad, como también lo es que ha servido como excusa perfecta para justificar la ineficiencia de muchos mandatarios locales, y la corrupción de otros.

Son muchas las medidas inexplicables e ilógicas adoptadas por varios mandatarios locales y funcionarios públicos que han utilizado la emergencia para hacer alarde innecesario de poder, olvidándose que no hay nada más efímero que un cargo público.

Llevamos varios meses y no se ve solución a la vista. La grave crisis económica apenas está por venir y se augura el final de este año y primer semestre del próximo, catastróficos.

Sería muy dispendioso enumerar todo lo sucedido en esta emergencia y las consecuencias que ha traído y traerá. Por ello causa desazón lo dicho esta semana por un importante funcionario de la salud anunciando lo que desde el principio sabíamos: “cada cual debe cuidarse, alimentarse bien, elevar defensas y hacer ejercicio” como el mecanismo más efectivo para enfrentar el virus.

Si es tan elemental la directriz, entonces para qué tanta parafernalia ?

Manizales, 12 julio 2020.

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