NOTICIAS INTERNACIONALES
16 julio 2018
EN HELSINKI PRIMERA CUMBRE BILATERAL TRUMP Y PUTIN
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y su homólogo ruso, Vladímir Putin, este lunes en Helsinki. REUTERS/EPV
EL PAÍS. Los presidentes de Estados Unidos, Donald Trump, y de Rusia, Vladimir Putin celebran este lunes en Helsinki su primera cumbre bilateral en la que ambos estarán conversando sobre la guerra de Siria, el desarme nuclear de Corea del Norte, la invasión a Crimea o la injerencia rusa. en las elecciones que llevaron al propio Trump a la Casa Blanca. La cita ha comenzado a las 13.20 hora local (10.20 GMT; 12.20 hora española) en el Palacio Presidencial de Helsinki, donde los dos dirigentes han mantenido una conversación a solas -con la mediación de intérpretes – durante hora y media y luego han almorzado junto a ministros y asesores. Trump ha declarado al inicio del encuentro: «Llevarse bien con Rusia no es malo, todo lo contrario». Por su lado, Putin ha dicho: «Ha llegado la hora de hablar detenidamente, también de los puntos de tensión, que son bastantes». Ambos mandatarios ofrecen una rueda de prensa conjunta. Sigue en directo el desarrollo de la cumbre.
EUROPA PIDE A CHINA, EE UU Y RUSIA EVITAR GUERRA COMERCIAL
Europa pide a China, EE UU y Rusia evitar la guerra comercial “para prevenir el conflicto y el caos”. Pekín y Bruselas acuerdan trabajar en una reforma de la Organización Mundial del Comercio para preservar el sistema multilateral.
El primer ministro chino, Li Keqiang, junto al presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, y el de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker. En vídeo, declaraciones de Tusk. HOW HWEE YOUNG (EFE) / VÍDEO: REUTERS-QUALITY.
EL PAÍS. El presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, ha advertido este lunes en Pekín de los peligros de una guerra arancelaria entre los dos principales bloques comerciales del planeta (China y EE UU), a los que instó a trabajar conjuntamente para preservar el sistema multilateral y “prevenir el conflicto y el caos”. Apenas unas horas antes de la cumbre entre Donald Trump y Vladímir Putin en Helsinki, Tusk abogó por una revisión de las normas que regulan el comercio internacional en el marco de la Organización Mundial del Comercio (OMC) incorporando asuntos peliagudos como los subsidios estatales o los derechos de propiedad intelectual, origen de la actual contienda comercial entre EE UU y China.
“Es el deber común de Europa y China, de América y Rusia, no destruir este orden, sino mejorarlo”, dijo Tusk en rueda de prensa, después de concluir en la capital china la cumbre anual entre los líderes de China y la Unión Europea (UE). “Hago un llamamiento a nuestros anfitriones chinos, pero también a los presidentes Trump y Putin, a iniciar conjuntamente este proceso con una reforma de la OMC”. En este sentido, Pekín y Bruselas han acordado establecer un grupo de trabajo conjunto a nivel viceministerial para abordar estos cambios. “Todavía hay tiempo para evitar el conflicto y el caos”, remarcó Tusk.
TRUMP: “LA UNIÓN EUROPEA ES UN ENEMIGO”
El presidente de EE UU justifica su afirmación por lo que el bloque comunitario «hace en comercio».
Donald Trump, en una imagen del pasado 20 de junio en Washington / En vídeo, un portavoz de Moscú analiza qué pasará en el encuentro entre Trump y PutinEVAN VUCCI AP.
EL PAÍS. Donald Trump lanzó este domingo otra bomba antidiplomática al recalcar que la Unión Europea es un «enemigo» para Estados Unidos. Lo dijo en una entrevista con el canal CBS y sin matices, como epílogo a una cumbre turbulenta de la OTAN en Bruselas y una visita no más tranquila a Reino Unido, que han agravado la grieta con sus viejos aliados. «Tenemos muchos enemigos. Creo que la Unión Europea es un enemigo, por lo que nos hace en el comercio. No lo pensarías de la UE, pero es un rival», respondió el líder de la mayor potencia mundial a la pregunta de cuáles consideraba que eran los principales rivales del país.
Acto seguido de las referencias a la UE, Trump citó a China y Rusia, aunque de forma más matizada. «Rusia es un enemigo en ciertos aspectos. China lo es económicamente, pero eso no significa que sean malos, significa que son competitivos». Donald Tusk, presidente del Consejo Europeo, reaccionó de inmediato a través de su cuenta de Twitter: «EE UU y la UE son los mejores amigos. Quien diga que somos enemigos está difundiendo noticias falsas», en inglés, fake news, unas de las expresiones favoritas del estadounidense para denigrar a los medios que le critican o para hacer desmentidos.
El distanciamiento de Trump con Europa comenzó con el abandono del acuerdo del clima, siguió con la ruptura del pacto nuclear iraní, y se ha agravado a niveles preocupantes por el comercio. En este terreno, Trump ha iniciado una guerra de tres grandes frentes al mismo tiempo: uno, contra sus socios del tratado comercial del Atlántico Norte (Nafta, en las siglas en inglés), Canadá y México; otro, con la Unión Europea; y otro, con China.
PUTIN QUIERE RECUPERAR EL PAPEL DE SUPERPOTENCIA EN SU CITA CON TRUM.
Las expectativas de los analistas sobre la reunión entre el mandatario estadounidense y el ruso son modestas, pues las relaciones están en su peor momento desde el fin de la guerra fría.
Donald Trump, y la primera dama, Melania Trump, a su llegada a Helsinki. En vídeo, un analista detalla las claves del próximo encuentro del presidente estadounidense con Putin. CHRIS MCGRATH (GETTY IMAGES) / VÍDEO: REUTERS-QUALITY
EL PAÍS. El espectáculo está garantizado en la cita de los presidentes de EE UU y Rusia en Helsinki. Así lo indican la personalidad de Donald Trump y Vladimir Putín, su común necesidad de presentar como éxito propio la demorada reunión de este lunes y el suspense alimentado ante la primera cumbre propiamente dicha entre los mandatarios. Pero los resultados del encuentro solo se podrán analizar sobriamente cuando la realidad disipe los efectos teatrales. Las expectativas de los analistas son modestas, pues las relaciones están en su peor momento desde el fin de la Guerra Fría.
Los vínculos bilaterales, lastrados por una desconfianza creciente, se han degradado cualitativamente desde 2014, cuando Rusia se anexionó Crimea y apoyó militarmente a los secesionistas de Ucrania. La principal urgencia internacional de Moscú es contener la escalada de sanciones occidentales que le imponen restricciones financieras y dañan su economía.
Desde el ámbito de la seguridad internacional, tal vez lo mejor que puede pasar, en opinión de Andréi Kortunov, director del Consejo de Asuntos Internacionales de Rusia (un influyente think tank cuyas siglas rusas son RSMD), es “reafirmar compromisos de principios” y “restablecer mecanismos de comunicación” bloqueados desde 2014, para que ambas partes puedan tomarse la temperatura de forma regular y evitar que las relaciones sigan descomponiéndose con el riesgo creciente de un enfrentamiento bélico directo. “Pase lo que pase, ambos presidentes intentarán presentar su reunión como un gran avance. Putin lo tiene mejor para anunciar un éxito porque no tiene ni un fiscal que lo investigue ni un Congreso que lo limite, sino funcionarios complacientes prestos a aplaudirle, pero Trump se le adelantará antes con su Twitter”, dice Kortunov con ironía.
Pese a su retórica sobre la sustitución de los socios occidentales por otros, como China, India, Irán o asociaciones de países emergentes como los BRICS, Putin quisiera restablecer la imagen de Rusia como superpotencia. En la mentalidad de la clase dirigente rusa (que sigue considerando a Washington como el último criterio de referencia), eso supone decidir en pie de igualdad con EE UU sobre el sistema de relaciones y reparto de responsabilidades en el mundo. Ahora bien, Rusia quiere volver a la relación de antaño sin concesiones en la forma de comprender su área de influencia, tanto en el entorno postsoviético como fuera de él.
NUEVO PRESIDENTE MEJICANO ANUNCIA PLAN DE AUSTERIDAD
López Obrador dibuja su plan de austeridad para cambiar el rostro del Gobierno. El presidente electo de México anuncia su plan para combatir la corrupción y acabar con los excesos de la alta burocracia.
López Obrador anuncia su plan de austeridad. MARIO GUZMÁN EFE
EL PAÍS. Andrés Manuel López Obrador ha dibujado las líneas maestras de su plan de austeridad a dos semanas de su aplastante victoria en las urnas. El próximo presidente de México anunció este domingo medio centenar de acciones, entre ellas rebajarse el sueldo un 60%, para combatir la corrupción y poner fin a los excesos de la alta burocracia en el Gobierno. Los cincuenta puntos permitirán al líder de Morena afianzar sus principales promesas de campaña y dar rostro a su Administración, que inicia el 1 de diciembre.
A lo largo de esta semana, el ganador de los comicios del 1 de julio ha ido dando forma a lo que será su Gobierno. El martes, López Obrador se reunió a puerta cerrada con los legisladores electos de su partido, que controlarán tanto la Cámara de Diputados como el Senado. Un diputado que acudió a la reunión relata los diversos agravios y agendas que salieron a aflorar de entre los parlamentarios. Entre ellos, una legisladora del Estado de México que pidió durante ocho minutos al presidente electo atender con urgencia el problema de la basura en un populoso municipio colindante con Ciudad de México.
El presidente electo se ha convertido en el gran receptáculo de la esperanza mexicana. Los representantes populares acuden a él como el todopoderoso que puede arreglar los problemas del país, por más pedestres que sean. «Tenemos que administrar las expectativas», aseguró Mario Delgado, próximo legislador de Morena.
En días recientes se ha hablado de legalizar la marihuana, legislar la voluntad anticipada (eutanasia) (eutanasia) y preparar un nuevo proyecto de Constitución. Sin embargo, López Obrador ha pedido a sus legisladores evitar agendas que polaricen. «No abusemos de la mayoría», les dijo el líder del movimiento a sus diputados y senadores, quienes formarán una legislatura de histórica mayoría el 1 de septiembre.
LA ECONOMÍA CHINA DE RALENTIZA EN EL SEGUNDO TRIMESTRE
EL PAÍS. China crece un 6,7%, una décima menos que entre enero y marzo, debido a los esfuerzos para contener el crédito. El país no nota aún los efectos de la guerra comercial.
Trabajador de una fábrica de guitarras en Zunyi, provincia china de Guizhou. CHINA STRINGER NETWORKREUTERS
China creció un 6,7% durante el segundo trimestre del año, una tasa ligeramente menor a la regisrada durante los tres primeros meses de 2018. Se trata, una vez más, de un comportamiento extremadamente estable para la segunda economía mundial, a pesar de estar inmersa en una campaña para controlar los riesgos financieros procedentes de la abultada deuda corporativa que ha lastrado la actividad del sector industrial en los últimos meses. A esta circunstancia se le suma además la incertidumbre derivada de su conflicto comercial con Estados Unidos, si bien su impacto no se aprecia aún en el cuadro macroeconómico de las autoridades del gigante asiático.
Varios indicadores han perdido fuelle en los últimos tres meses: la inversión en activos fijos ha pasado de crecer un 7,5% en marzo a un 6% en junio, la producción industrial de un 6,8% en el primer trimestre a un 6% en el segundo, o las ventas al por menor del 9,8% al 9%, informa la Oficina Nacional de Estadísticas china. La desaceleración se debe en un cierto cambio de paradigma de las autoridades, que tras dar prácticamente por cumplido su objetivo de crecimiento para este año (de alrededor del 6,5%), han decidido incrementar los esfuerzos para contener el crecimiento de la deuda y reducir la hasta ahora prolífica actividad del sector bancario en la sombra, cuyos negocios suponen un riesgo para la economía del país.
Las empresas han notado este cambio de tendencia con un encarecimiento del crédito, lo que ha arrastrado a la baja los niveles tanto de inversión como de producción industrial entre abril y junio.
Los vaivenes internos, sumados a la incertidumbre derivada del conflicto comercial con Estados Unidos, han provocado ya unas primeras medidas de flexibilización monetaria por parte del Banco Central chino.
El gigante asiático, segunda economía mundial y primera potencia comercial, no nota de momento los efectos de su conflicto arancelario con Estados Unidos. La primera ronda significativa de tarifas entre ambos países, que afectan a mercancías valoradas en 34.000 millones de dólares por cada lado, no tiene efectos sobre estos datos porque los nuevos impuestos entraron en vigor el mes de julio. Su impacto en la contabilidad nacional, de haberlo, empezará a sentirse a partir de la segunda mitad de año y el próximo. La incertidumbre derivada de este conflicto, sin embargo, sí ha hecho mella en los mercados financieros y en los índices de confianza empresarial. También ha provocado una nada despreciable depreciación de la moneda china, el yuan, que ha perdido frente al dólar alrededor de un 6% en el último trimestre.
