Opinion

Carlos Felipe ‘Pipe’ Córdoba Larrarte

Mario Arias Gómez

Por: Mario Arias Gómez.

Los colombianos -biempensantes- por enésima salimos hoy (23/11/2024) a llenar las calles y plazas como muestra de rechazo de la impresentable, estéril, apocalíptica gestión del parasitario, resentido, trastornado gobierno del presidente Petro -en su peor versión- calificado -sin tapujos, sin pelos en la lengua- como “el peor de la historia reciente de Colombia”, censurada por autoritaria, centralista, corrupta, por la inseguridad -física y jurídica-, por la falta de oportunidades, el agravamiento del desempleo, la pobreza, la polarización; por un interminable etcétera.

Por si faltara, por los ataques a la prensa que destapa -sin empacho- los atropellos, improperios, tropelías contra los que no comulgan con su estilo de gobierno; desnuda el perverso retroceso democrático, el solapado abandono de la función misional; la enigmática, ensoberbecida, vengativa desarticulación de los órganos de inteligencia; el freno, neutralización, sujeción de las fuerzas policiales; la cesación, desmovilización de las Fuerzas Especiales, a solicitud -se asegura- del ELN, en favor de los expandidos, residuales grupos de las FARC, de matones, narcos y delincuentes.

Marchas -sin dueños- que protestan por las tóxicas petrorreformas: laboral, tributaria -la número 12 en los últimos 20 años-, pensional, política, de la salud, los servicios públicos; la soterrada, lunática, inconcebible intención de perpetuarse (su leitmotiv) en el mando.

Escupitajos contra el ominoso desgobierno -afecto a la trampa- en menoscabo del Estado de Derecho, la institucionalidad resultas de la cacareada, hipócrita, idealizada ‘Paz total’, de la ciega, draconiana, opresiva, política -sin pies ni cabeza- refinadamente maligna, siniestra, soberbia, concebida por el presidente Petro -de baja catadura moral- que transpira el ‘quid pro quo’ (algo por algo), con nefastos, evidentes propósitos, en beneficio de los correligionarios del M-19; de esbirros y secuaces, criminales de la más baja calaña; de la cúpula de las AUC. en cumplimiento de los presuntos, nauseabundos compromisos en campaña, suscritos en la cárcel; recónditas adhesiones, pagas -se agrega- con las recónditas adhesiones, con la graduación como ‘gestores de paz’ de los 18 paramilitares, encabezados por Mancuso y Hernán Giraldo (“Taladro”, el “Monstruo de la Sierra”, con las ciento y pico de menores vírgenes abusadas a cuestas.

Inmundicia causante del daño -irreparable- a la moral pública, contra el que protestamos los desencantados electores que exaltamos a Petro, los que enervados, impacientes observamos, impotentes, cómo el país lo hunde las impróvidas, manchadas manos de Petro, benévolas, solícitas con la delincuencia, los mismos que hoy, irónicamente, en un explicable, libertario rapto de independencia lo fustigan, increpan con el atronador, estruendoso pregón “Fuera, fuera Petro”. Ineluctable, irredimible, tácita, vergonzosa inhabilitación moral.

Impunes, intolerables, oprobiosas artimañas explotadas, exprimidas por las burdas, inefables, locuaces, maquiavélicas, minúsculas; María Fernanda Cabal, Paloma Valencia, el ultramontano paracaidista Miguel Uribe, la mediocridad reinante -en todo su furor- que, sin méritos, reconocimiento colectivo, se les adelantó a sus émulas, autoerigiéndose nuevo mesías, al que se le llena la boca prometiendo el oro y el moro; ríos de leche, miel y mantequilla; asegurando que en ‘su’ mandato, apaciguará, armonizará, reconciliará al país, cerrará, cicatrizará las heridas. Si Goyeneche viviera, diría: “De eso tan bueno no dan tanto”.

Obviedades -sine qua non- desgastadas, desprestigiadas por este imberbe, nimio prestidigitador, vendedor de humo, del quimérico ‘País de Jauja’, delineado en sus sosas peroratas, plagadas de lugares comunes, de sandeces con las que emboba, envolata el populacho.

Hablando de precandidaturas, acaba de conocerse una robusta encuesta efectuada en el ‘Viejo Caldas’, a instancias de la propuesta del expresidente Gaviria, a las plurales fuerzas afines al credo de la corrección política, de los cánones de la justicia, en la que invoca un desprendido, racional gesto de supervivencia, que se decida por un candidato de consenso, que enfrente en las urnas el vertiginosamente acrecentado legado petrista: el chantaje, la extorción, la recesión, el secuestro.

Sondeo que auscultó la intención de voto para las presidenciales del 2026, liderando el ranking el juvenil CARLOS FELIPE ‘PIPE’ CÓRDOBA LARRARTE.

Coterráneo de postín, reserva moral, Inexpugnable, acatado, con impensada, reconocida capacidad de convocatoria; fortaleza adornada por su inteligencia, formación, experiencia, madurez; virtuosidades que inspiran confianza, respeto, habilitantes para el desempeño de tan alto cargo, para la tarea -prioritaria-, de tomar por los cuernos la desbocada, luciferina, pavorosa, recrudecida inseguridad consumada por las hordas de asesinos, de mercenarios que han convertido la patria en tierra de nadie, ingobernable; ralea que impávida campea, se pasea a sus anchas por el territorio, ajusticiando líderes sociales; agraviando, violando los DH.

Capacidad de convocatoria -repito- demostrada por quien, a los 38 años, honrosamente escaló la Contraloría General de la República, que otrora ocupó una pléyade de estelares, históricos, icónicos valores como Carlos Lleras Restrepo, Germán Zea Hernández, el Cofrade Palacio Rudas, Evaristo Surdís, Víctor G. Ricardo (padre), entre otros.

Elección materializada por el Congreso en pleno, por 203 votos de los 140 requeridos, de un total de 280 miembros; votación proveniente del Partido Liberal, Conservador, Cambio Radical, ‘La U’, Centro Democrático y algunos independientes y opositores.

Transparente proceso tutelado por la U. Industrial de Santander, en el que en el concurso de méritos ocupó el tercer puesto; en la prueba de conocimientos, obtuvo 86 puntos sobre 100; Hoja de vida óptimamente calificada; ítems que validaron su condición de finalista.

Talentoso personaje -académica, ética, intelectual, moralmente valorado-. A pesar de su corta edad, es un curtido servidor público, con un amplio, atractivo currículum: Asesor de la Presidencia de la República en el Programa Colombia Joven; secretario de Gobierno de Pereira y privado del Gobernador de Risaralda; Vicecontralor General; Auditor General de la República, nominado por el Consejo de Estado; director nacional del Programa anticontrabando de la Federación Nacional de Departamentos, Contralor delegado para la Participación Ciudadana, director de Promoción y Desarrollo del Control Ciudadano de la Contraloría General; contralor general encargado; secretario privado de Germán Vargas Lleras; director ejecutivo de la Federación Nacional de Departamentos.

Egresado de la U. Externado de Colombia, título: ‘Gobierno y Relaciones Internacionales’; abogado del Politécnico Gran Colombiano; Alta Gerencia -U. Libre (Seccional Pereira)-; Máster en ‘Acción Política, Fortalecimiento Institucional y Participación Ciudadana en el Estado de Derecho’, U. Francisco de Vitoria de Madrid; Doctorado en Derecho de la Universidad Rey Juan Carlos de Jaén-España y Colegio de Abogados de Madrid, Ph. D., ‘Summa cum laude’: “La buena administración en el control fiscal efectivo, estratégico y gerencial de los recursos públicos”.

Casado con Marcela Yepes Gómez, exdirectora Administrativa y Financiera de la Fiscalía General -Pereira-, igual, en la Contraloría General; exdirectora Nacional de Apoyo de la Fiscalía General, y exdirectora de Control Interno de la misma entidad; hija del entrañable, cimero exsenador, Omar Yepes Alzate y de Olga Marina Gómez (empresaria).
Manizales, 23 de noviembre de 2024.
http://articulosmarioariasgomez.blogspot.com.co/30

Lo más visto

Subir