Por: José Oscar González Hernández. Se desempeñó como alcalde de Pensilvania, Diputado a la Asamblea de Caldas, Personero de Manizales.
En las marchas del primero de mayo por fin nos enteramos los colombianos que los opositores al presidente como los amigos de éste, salieron a las calles tanto el 21 de abril, como la del día anterior.
Para el presidente Petro los últimos días ha tenido unos momentos agridulces. Primero le hundieron la reforma a la salud y sabemos todos los despliegues que desde el ejecutivo hizo sobre las bondades de dicha reforma; y en orden de prioridades seguía la reforma pensional que después de varias reuniones con integrantes del partido liberal llegaron a unos acuerdos sobre varios artículos entre ellos donde se bajaba el umbral de cotización de 3 salarios mínimos para Colpensiones a 2,3 salarios.
Siempre en la vida parlamentaria y en materia de acuerdos sobre artículos de un proyecto de ley se han respetado los acuerdos. Pero para sorpresa de todos, al día siguiente el señor presidente nos sorprendió diciéndonos que él le pediría a la Cámara de Representantes que dicho umbral lo suba a 4 salarios mínimos para aportar a Colpensiones.
Esta actitud del presidente es una acción de un mal jugador y que no respeta los acuerdos; sobre este detalle se puede escribir lo que se quiera, pero no podemos olvidar y dejar a un lado que ese es el carisma del presidente; toda la vida y por su forma de ser ególatra y creerse un Mesías no admite transacciones y exige que sus proyectos se aprueben tal y como él los propuso.
Para entender la propuesta del ejecutivo con su proyecto de reforma pensional es que está aplicando un sistema que lo diseñó y lo pone en práctica y lentamente nos está llevando a lo que él quiere para su estado socialista del siglo XXI.
Presenta una reforma sobre cualquier materia y puede ocurrir: 1- la reforma se aprueba tal como el ejecutivo la presentó. 2- La reforma para poder ser aprobada se necesita hacer unos acuerdos parlamentarios y se aprueba más o menos a medias de las ideas presidenciales. 3- La reforma es negada.
Lo que sucede en el numeral 1- no tiene inconveniente. Lo que sucede en el numeral 2- Pasa la reforma con acuerdos y se busca en los siguientes debates que ese acuerdo de rebaja o de negociación no se cumpla. Y en el 3- punto es la disculpa perfecta para sindicar al Congreso que no están sintonizados con el pueblo, que hacen parte del Estado mafioso que ellos quieren cambiar, vienen a asustarnos con una constituyente del pueblo, no la de la Constitución y seguidamente sin hacer escándalos vía decretos el gobierno cambia y pone en funcionamiento lo que él quería cambiar vía reforma.
Los cambios revolucionarios que Petro prometió poco a poco los ha ido implementando por la vía administrativa y como ejemplo tenemos la salud de los profesores que nos dicen que va a ser el ejemplo de lo que se quiere en salud. Igualmente hay llevan lentamente la reforma a la educación y nadie nos ha dicho nada.
Esperamos que todo esto que se surta sea por el bien de todos los colombianos.
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