DESFINANCIADOS

EDITORIAL

Hace tres semanas se conoció la solicitud presentada por la mayoría de gobernadores al Presidente de la Republica para que bajo las facultades extraordinarias que posee, amplíe el plazo de la elaboración y aprobación de los Planes de Desarrollo.

Esta misma solicitud debería ser apoyada y avalada por los alcaldes municipales. Las condiciones socioeconómicas de sus municipios, el sistema de salud local y el presupuesto, ya no son los mismos que encontraron en sus empalmes y al momento de su posesión.

Los Planes de gobierno se elaboran sobre la base del voto programático, sin embargo, en circunstancias tan especiales como estas, las necesidades y prioridades han cambiado.

Todos los presupuestos municipales y departamentales han tenido que ser afectados para atender la emergencia ocasionada por el coronavirus covid-19, no hubo tiempo suficiente para la socialización con las comunidades debido al aislamiento, los ejes estratégicos se deben replantear, no todos los municipios cuentan con herramientas virtuales para su difusión y participación ciudadana; y los equipos encargados de su estructuración y elaboración, tampoco han tenido el suficiente lapso para ello.

El análisis, discusión y aprobación de los proyectos de Planes de Desarrollo inician el primero de mayo próximo en las asambleas departamentales y concejo municipales, según sea el caso, de acuerdo con los plazos establecidos en la Ley 152 de 1994 o Ley Orgánica del Plan de Desarrollo. El 31 del mismo mes deben estar aprobados.

El aislamiento preventivo obligatorio fue ampliado hasta el 10 de mayo y no se sabe si para algunos sectores será ampliado. Los alcaldes y gobernadores prácticamente no han tenido tiempo para preparar los planes de desarrollo, están a las carreras para cumplir con los plazos estipulados, y de las carreras no queda si no el cansancio, dicen por ahí.

A los actuales alcaldes y gobernadores les tocó bailar con la más fea y de no aterrizar sus planes de desarrollo, serán un simple saludo a la bandera como se dice popularmente. Ninguna autoridad sabe hasta cuándo dure esta emergencia y lo peor está por venir cuando empiece a llegar el covid-19 a los 851 municipios del país donde aún no ha hecho presencia.

Además, muchos Concejos Municipales no van a sesionar durante los diez primeros días de mayo para cumplir con el aislamiento ordenado por el Gobierno Nacional. Lo más sano sería que el Departamento Nacional de Planeación modificara el cronograma establecido.

La emergencia por el covid-19 acaparó la atención de todas las autoridades departamentales y municipales, lo mismo que de la ciudadanía. De ahí que el proceso de los Planes de Desarrollo prácticamente se tenga que reiniciar y lo lógico sería que se fijara como nueva fecha el mes de agosto próximo.

Manizales, abril 26 de 2020.