Los departamentos del llamado Eje Cafetero ubicados en el centro del país, hasta hace poco eran considerados, después de Antioquia, el gran bastión uribista de Colombia. Tenían 2 senadores y 3 representantes a la cámara del partido centro democrático.
Esto cambió el pasado domingo cuando ninguno de estos tres departamentos, Caldas, Risaralda y Quindío eligió representantes a la cámara uribistas. Tampoco en la lista de 14 senadores del centro democrático se encuentra algún dirigente de esta región.
La reciente visita de Álvaro Uribe Vélez al Eje Cafetero promocionando la candidatura de Oscar Iván Zuluaga a la presidencia de la república y sus listas al congreso, presagiaban este desenlace electoral por las silbatinas de las cuales fue objeto el expresidente en Pereira, Chinchiná y Manizales, y las manifestaciones en su contra.
Ni la candidatura presidencial de Oscar Iván Zuluaga nacido en Pensilvania Caldas, ni la presencia permanente de senadores de tanto peso dentro del uribismo como Paola Holguín y Alejandro Corrales, fueron suficientes para motivar al elector cafetero a votar por las listas uribistas a la cámara de representantes.
Mientras el uribismo pierde espacios, los grupos alternativos e independientes los ganan al elegir 4 representantes a la cámara y un senador del eje cafetero.
Al ya viejo y desgastado uribismo no le queda más que tratar de recuperar poder local eligiendo alcaldes y concejales en las elecciones del 29 de octubre de 2023, o cambiar de razón social como en varias oportunidades lo han hecho.
Manizales, 16 marzo 2022.
