Opinion

¿LOS PROGRAMAS DE GOBIERNO PARA CUANDO? *

José Ferney Paz Quintero

Transcurre el debate electoral lleno de fragosidades que culminará con la elección parlamentaria y presidencial, cargado de tensiones, acusaciones mutuas, frases de grueso calibre, coaliciones de papel de última hora, con amenazas de rompimiento por algunos de sus miembros, otras haciéndolas efectivas, como la de una distinguida dama colombo francesa cabeza de un movimiento político con personería reconocida por una largueza jurídica de la Corte Constitucional.

La presencia de un tropel de aspirantes, unos con merecimientos y otros no tantos, buscando afanosamente ser tenidos en cuenta, todos tratando de enarbolar la bandera de la corrupción, invocando al unísono una frontal batalla para su extinción, ignorando deliberadamente la presencia de algunos exponentes de ese cáncer en las listas inscritas ante la Registraduría, muchos denunciados por los diferentes medios y comentaristas de opinión.

Llama la atención que en los recientes mal llamados debates con algunos aspirantes presidenciales nada  se aporta  en tesis, ideas de gobierno o controversia ideológica sobre los graves y delicados problemas del país, en materia fiscal  como presupuestal, de la informalidad, de la deserción escolar, violencia intrafamiliar, ¿cómo proteger a más de cuatro millones de desplazados por la violencia guerrillera, paramilitar y la guerra sucia expulsados  de sus territorios a pesar que se sostenga que se ha sellado la paz? ¿Cómo ajustar al marco constitucional la justicia transicional? ¿Cómo afrontar el deficiente o casi nulo sistema de salud para que nuestros enfermos no se mueran en las puertas de los pocos hospitales que aún prestan el servicio público?

Pero lo más sorprendente es la ausencia en esos debates, de un tema que debería ser prioritario en la agenda de dichos aspirantes, cual es el de la JUSTICIA, hoy en cuidados intensivos, por cuanto como ciudadanos nos interesa conocer que piensan sobre algo tan indispensable para la paz social, ¿Qué hacer para eliminar la congestión que origina el atraso judicial, para que no se tenga que esperar 6 o más años para un fallo de fondo?

¿Qué hacer para devolverle la credibilidad de la misma ante la sociedad, cuando un 87 por ciento de los ciudadanos no creen en ella ? por morosa, alejada de la realidad del país, maltrecha por los escándalos de corrupción de algunos de sus integrantes ?

¿Qué hacer para erradicar el protagonismo en ciertas investigaciones penales que en últimas terminan fallidas, dejando al descubierto favorecimientos ilegales a reconocidos personajes que han infringido el estatuto penal ?

¿Qué hacer para regresar a la seguridad jurídica, por cuanto el respeto de la sociedad hacia el derecho solo se logra si las soluciones jurídicas son predecibles, con una correcta aplicación de las normas jurídicas por encima de cualquier otra consideración ?

¿Qué hacer para que todos los colombianos tengan el libre acceso a la justicia como un derecho fundamental, actuando con celeridad y acatamiento al debido proceso ?

¿Qué hacer para que los funcionarios administrativos no puedan crear derecho y acaten en el ejercicio de su función pública el marco normativo existente y los precedentes existentes ?

¿Qué opinión les merece la mal reforma judicial aprobada por este Congreso, donde se reducen los requisitos para ocupar altos cargos en la rama judicial, Fiscalía General, que al decir de muchos para favorecer intereses individuales? ¿Qué hacer para evitar el desbordado poder de los órganos de control que afecta la seguridad jurídica ?

Ojalá así lo entiendan las personas que se disputan el favor popular para acceder a la primera magistratura, exponiendo sus programas de gobierno con claridad, altura política, dejando de lado el protagonismo y las jactancias, fui el “mejor gobernador “, “el mejor alcalde“, el mejor opositor político”, eso fue en el pasado, necesitamos que se ubiquen en el presente.

ADENDA: Increíble. Con siete meses de anticipación la mesa directiva del Congreso próximo a fenecer abre el proceso de elección del nuevo Contralor General de la República, buscando así dejar sin juego alguno al nuevo Congreso.  Las mañas de la desgastada y vieja política causante de la perversión que invade la institucionalidad. Y se quejan luego de su baja aceptación ciudadana en las mediciones de opinión.

* Por: J. F. Paz – Exmagistrado / Consultor. – Presidente Tribunal de Control Ético del partido liberal colombiano.

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