Por: José Oscar González Hernández. Se desempeñó como alcalde de Pensilvania, Diputado a la Asamblea de Caldas, Personero de Manizales.
El Plan Nacional de Vacunación del gobierno nacional, siendo una herramienta para protegernos y que debiera haber tenido la aceptación unánime de todos los colombianos, generó más ruido que cualquier otra propuesta hecha por el presidente.
La primera duda que generó fue cuando no nos contaron en forma clara y rápida cuanto habían costado las vacunas. Seguidamente se comenzó a sacar disculpas cuando se le solicitó al Ministro de Salud copia de los contratos. Inmediatamente comenzaron a decir unas disculpas y verdades a medias y fueron creando un manto de misterio que perdimos la fe en los funcionarios.
A mi modo de ver esta contratación de vacunas desde el primer momento se debió haberle entregado a la opinión pública copia de los contratos. Si existen cláusulas de confidencialidad, haberlas obviado, pero no comenzar a sacar disculpas el ministro de Salud y a lo último decir que quien había firmado los contratos era la Oficina de atención de desastres. Ahí confirman que están escondiendo algo. A veces se encuentra uno en las redes con cifras del valor de la vacuna que no se sabe si reírse o preocuparse y esto se da, por no haber sido claros desde el inicio. Ahí tenemos al ministro respondiendo tutelas sobre dichos contratos.
Para acabar de enrarecer el ambiente, el señor Presidente al inicio del año visitó con su Ministro de Justicia y delegó en otros funcionarios la presencia en las altas cortes para pedirles que no fueran a fallar tutelas que tuvieran que ver con el cronograma de la vacunación. Esto si fue una pifiada mayor. Ha sido tanto el poder que ha acumulado el señor Presidente con las altas cortes que ya les está pidiendo que prevariquen. Olvidan en palacio que el artículo 86 de nuestra Constitución nos dice que toda persona tendrá acción de tutela para reclamar ante los jueces y en todo momento, subrayado mío, la protección inmediata de sus derechos fundamentales.
Aquí en este hecho también se pude estar presentando el fenómeno que días atrás reseñamos sobre la independencia de las tres ramas, y la injerencia que el ejecutivo está teniendo ante ellos y que parecía que estaba gobernando con ellos. La visita del gobierno a las altas cortes con semejante objetivo fue una salida en falso y esperamos que dichas corporaciones hayan aguantado la presión y apliquen la ley.
Lamentable el deceso del señor Ministro de la Defensa; pero esto es un llamado de atención para aquellos nagacionistas, si falleció el ministro con toda la ciencia médica a sus pies en el hospital militar de Bogotá y no pudieron salvarlo, miremos que al resto de mortales como deben luchar con menos recursos.
Todavía me resisto a creer que aquello que en forma sutil ha dicho el presidente y ha presionado a la rama judicial fue interpretado mal y que sólo se estaba pidiendo colaboración armónica dentro de la independencia.
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