Por: Homero.
Como el hecho político de la semana en Caldas se puede catalogar la renuncia de Juan Sebastián Gómez Gonzáles a su curul en la Asamblea Departamental de la cual era su presidente, y a su militancia en el Partido de La U.
Mucho se especula sobre esto aunque la próxima semana no se hablará de ello en Caldas y otro tema ocupará los primeros lugares porque somos inmediatistas.
De darse la llegada de Juan Sebastián al Partido Verde, en lugar del regocijo que debería causar, generará desconfianzas e incertidumbres. Allá también hay radicales y fundamentalistas que se creen el oro y califican a los demás como la escoria.
Aún sin definirse si el exdiputado lucirá el girasol, ya se generó la primera reacción. Se trata del Director del Partido Verde en Caldas y tradicional dirigente, Jorge Eduardo Arbeláez Hoyos, quien renunció a seguir siendo verde, y lo mismo hará la concejal de Manizales Adriana Arango y todos los amigos del excandidato presidencial Antanas Mockus.
Al alcalde de Manizales, Carlos Mario Marín, tampoco le ha caído en gracia la posibilidad de la candidatura a la cámara por los Verdes de Juan Sebastián y ya está empacando las maletas de su candidato a la cámara de representantes porque no lo hará contar con el exdiputado.
Hasta ahora, todo indica que la unidad verde en Caldas está lejos de conseguirse y que no se avizora el sol hacia donde debe girar su girasol.
Quienes andan de plácemes son los lizcanistas porque les quedó el Partido de La U para ellos solitos en Caldas, se fortalecerán en la Asamblea Departamental al pasar de dos a tres diputados y conformarán la lista para la cámara de representantes a su amaño incluyendo a un candidato del alcalde de Manizales, Carlos Mario Marín, quien tan generosamente los ha tratado burocráticamente.
Conocedores del apetito burocrático del lizcanismo, una vez se posesione su nuevo diputado, visitarán al gobernador de Caldas para solicitarle que les sea entregada la cuota del exdiputado Juan Sebastián. Luis Carlos no se las entregará toda, solo una parte, y ahí sucumbirá una de sus secretarías de despacho, infraestructura o cultura.
A Juan Sebastián le salvará la papeleta Guido si finalmente se decide y aspirar al senado, del cual sería su fórmula. Sin embargo, nuestro exgobernador no es un hombre que tome fácilmente decisiones y le gusta esperar hasta el último minuto. Actualmente está en zona de confort, en la academia, que es lo que realmente le gusta, y con la posibilidad real de volver a ser candidato a la gobernación de Caldas en octubre de 2023 porque su patrimonio electoral sigue intacto y no tiene necesidad de arriesgarse a una campaña nacional para congreso que es desgastante física y económicamente.
No la tiene fácil. Los meses que se avecinan serán determinantes en las aspiraciones de Juan Sebastián. Una cosa es con credencial y otra sin ella, y falta saber lo que están pensando sus amigos de otras batallas como Fabio Arias quien tiene su propia organización política denominada “Caldas Avanza» con agenda política propia, y sus socios en la Asamblea, Oscar Alonso Vargas y Mauricio Londoño si están dispuestos a ir con él hasta el final.
15 de noviembre de 2020.