Por: Alejandro Loaiza Salazar – Enlace Congreso de la República. Oriundo de Samaná, con estudios en Gobierno y Relaciones Internacionales de la Universidad Externado de Colombia. Por: Alejandro Loaiza Salazar – Enlace Congreso de la República. Oriundo de Samaná, con estudios en Gobierno y Relaciones Internacionales de la Universidad Externado de Colombia.
No es una columna de opinión, es una exigencia como ciudadano, como cualquier individuo que paga impuestos y que ejerce su voto, y que con ello le da la posibilidad de pedir con urgencia explicaciones al ministerio de defensa, al gobernador de Caldas y los alcaldes de la Dorada, Victoria y Samaná, las razones por las cuales nos generan a nosotros, quienes nos dolemos por la situación del orden publico en el oriente de Caldas, desconocer lo que está pasando.
En estos municipios hemos visto últimamente situaciones que generan alteraciones de la paz. Y aunque un grafiti solo puede ser eso; el miedo de retornar a otras épocas, pueden estas simples señales, estos simples grafitis magnificar lo que pudiera ser simple vandalismo. Por eso con urgencia necesitamos saber a ciencia cierta lo que realmente esta pasando.
Hasta hace no pocos días panfletos circundan nuestras regiones, así como grafitis que evocan épocas violentas, son visibles en nuestros caminos; y aunque parecieran son originados ellos en mentes absurdas e indolentes, deberían con urgencia e importancia debida, las autoridades distinguir y explicar el origen de tan agobiante situación.
Como simple señal de que es simple vandalismo tropas del ejército deberían hoy estar cubriendo estas señales de irritante y preocupante violencia, con pinturas que borren del imaginario colectivo aquella remembranza de terribles épocas.
O es que simplemente se le ha salido de las manos a nuestro gobierno y fuerza pública mantener la paz de territorios que por años han sido remansos de paz, permitiendo que nuestra región sea copada nuevamente por fuerzas violentas, y por ello a cambio de acciones diligentes, por ejemplo nuestra policía nacional, se dedique a recorrer cómodamente las cabeceras municipales persiguiendo borrachos de turno, justificando con ello sus sueldos, temerosos también de combatir el terrorismo de facto de algunos individuos o de organizados grupos.
Explicaciones urgentes ante lo acontecido son exigidas por nuestros territorios, o es que pretenden que el terrorismo de medios, o el chisme recurrente, irrumpa nuevamente en las mentes de quienes habitamos estas montañas.
Requerimos policía y ejército efectivo y diligente, que por lo menos de razones de lo que pasa en nuestro territorio, y no simplemente se dediquen a buscar el sonido mas estruendoso de la cuadra.
No es posible que a estas alturas, y mucho menos bajo un gobierno que dice tener como bandera la salvaguarda del orden público, se generen situaciones desde hace muchos años nunca vistas.
Twitter: @AlejandroLSFD
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