Opinion

NI TAN NORMAL

Por: José Octavio Cardona León – Ex Alcalde de Manizales.

El gobierno nacional expidió el decreto 1168 por medio del cual se retorna a un aislamiento selectivo con distanciamiento individual responsable, lo que antes quisieron denominar “aislamiento inteligente”.

Han pasado 5 meses y medio desde que nos confinaron a una seguidilla de cuarentenas o aislamientos, lo que lentamente ha generado la sensación de soledad colectiva, la sensación de ausencia social, la sensación de amigos olvidados.

Muchos ciudadanos se cuidaron de manera juiciosa durante el tiempo de las cuarentenas, otros tantos salieron a trabajar manteniendo rigurosas medidas de seguridad y aun así el país pasó de tener cero infectados a cerca de 600.000, con 20.000 fallecidos por cuenta del COVID 19.

Ahora que se habla de una nueva normalidad, se tiene una percepción errada del contenido del decreto 1168, pues muchos han entendido que el decreto en mención “descovidficó” el virus; han entendido que ahora todo es igual de normal que antes, que en consecuencia se pueden organizar fiestas, reuniones, pachangas, y el virus no estará presente por cuenta del referido acto administrativo.

Otros han entendido que ante una vida “tan normal”, volvieron los paseos, las reuniones, los encuentros, cosa que tampoco es verdad, pues la presencia del virus es asunto que no se discute.

Tal como van las cosas nos tendremos que acostumbrar a vivir en medio del virus, aceptando con resignación que es muy posible que en cualquier momento estemos enfermos, o que un amigo o pariente cercano sea la nueva víctima de esta enfermedad.

Por eso debo afirmar que la situación no está tan normal como muchos creen, ni tan normal como otros piensan.

Recordemos que en marzo, justo cuando empezó la situación, Martha Ospina directora del INS manifestó que los pronósticos y las proyecciones indicaban que el país llegaría a CUATRO MILLONES de contagiados por COVID 19, de los cuales el 80% tendría síntomas leves.

Así las cosas, hasta ahora solo tenemos el 15% de los infectados según la proyección, lo que indica que nos faltan 3.4 millones de infectados que equivalen al 85% según cálculos del INS.

Según se ha visto, la letalidad del virus es del orden del 3%, lo que nos lleva a pensar que si se cumplieran las proyecciones y llegásemos a los cuatro millones de contagios, nos faltarían en consecuencia 100.000 muertos por cuenta de esta pandemia.

Entonces no es tan normal lo que está ocurriendo. Es simplemente que el gobierno entendió que la economía no aguanta más con la clase trabajadora en casa y con las empresas paralizadas por efectos de las decisiones administrativas relacionadas.

Por eso es por lo que ahora más que nunca se necesita compromiso de cada uno de nosotros, pues el gobierno no tiene un policía para cada colombiano y el virus no entiende de leyes o decretos, aquí cada cual es responsable de su vida y de su suerte.

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