Por: José Oscar González Hernández. Se desempeñó como Alcalde de Pensilvania, Diputado a la Asamblea de Caldas, Personero de Manizales.
Por la cuarentena que poco a poco la hemos visto desfilar por nuestras vidas varios hechos noticiosos han pasado de agache para la opinión pública.
Que descachada la del señor Fiscal General con el auto de detención contra el señor Gobernador de Antioquia. No por la investigación, es que quince años no son nada, sino por la medida de aseguramiento, ya que en días anteriores su oficina de la Fiscalía había dado una orden que sólo se decretara una medida de aseguramiento contra un sindicado si éste podía obstruir la investigación o tuviera facilidad para fugarse de la acción de los entes judiciales. A muchos nos da por pensar que lo que hizo el señor Fiscal es intentar tender una cortina de humo sobre el caso de la “ñeñe política” ya que su amigo el hoy presidente allí queda en muy mal estado.
Otra polémica que nos han servido es la presencia de un contingente de soldados de los Estados Unidos que llegaron al país para ayudarnos con el problema del narcotráfico. Con todo el respeto por las autoridades, pero creo que la única ayuda que nos puede hacer el gobierno americano es con recursos económicos, porque sabemos que uno de los países del mundo que más consume sustancias alucinógenas son los Estados Unidos y sabemos que ellos no hacen nada para impedir que su juventud y sus ciudadanos prevengan el consumo de dichas sustancias. Pero mirando el artículo 173 numeral 4º de nuestra Constitución dentro de las atribuciones del Senado es permitir el tránsito de tropas extranjeras por el territorio y hasta donde sabemos este trámite no se ha cumplido.
Como buenos santanderistas, ya han comenzado las explicaciones. Que ellos no se van a mover del sitio a donde llegaron, que ellos no están de paso en el país, que es a lo que se refiere el numeral aludido de la constitución, etc. Si miramos un poco más allá de los hechos y como está de revolcado el vecindario, especialmente las relaciones con Venezuela, que tal si lo que está haciendo los Estados Unidos es tener unas unidades de apoyo aquí en la antesala de Venezuela para un futuro conflicto armado, si se llegare a presentar.
Lastimosamente tenemos que mirar a nuestros hermanos venezolanos que la están pasando muy mal. Lo único que produce Venezuela es petróleo, tiene las reservas más grandes del mundo, pero acabó con su refinería y de contera con PDVESA, que es comparable con nuestro Ecopetrol, pero unas veces más grande; hoy en Venezuela no hay gasolina para movilizar al país. No tienen agua potable y es una incógnita el manejo de la pandemia del COVID-19, al mundo le dicen que no hay mucho contagiado, pero los expertos no les creen.
Si miramos la caldera de problemas que hoy tiene Venezuela y nosotros que somos sus vecinos, si esta caldera explota, no quiero pensar en todas las consecuencias negativas para nuestro país; seremos los primeros damnificados y si a eso le agregamos que las fuerzas de un país que ha querido derribar al sátrapa las tenemos aquí en misión oficial, ahí si digamos como el dicho: Que el Señor nos coja confesados.
El futuro de nuestro vecino es muy incierto y no perdamos de vista que nos puede arrastrar en su conflagración.
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