TOMADO DE SEMANA.COM
29 junio 2019
Según la encuesta Gallup Poll, los colombianos sienten que las cosas en el país han empeorado. Aunque apoyan causas del Gobierno como el rechazo a la libertad de Santrich y a la prohibición de consumo de drogas en lugares públicos, esas causas no se traducen en popularidad presidencial.
Llama la atención que, aunque las posiciones del gobierno frente a los temas anteriores coinciden con la opinión pública, la imagen presidencial no logra repuntar. Foto: SEMANA.
El país no logra salir del pesimismo generalizado en el que entró hace unos meses y cada vez se consolida más como una tendencia. El estado de opinión –concepto alrededor del cual han gravitado los debates políticos últimamente tras las declaraciones del expresidente Álvaro Uribe- es de desasosiego y poco entusiasmo. Así lo revela la última encuesta Gallup Poll, aplicada en todo el país entre el 14 y el 21 de junio pasado.
En contexto: Encuesta mayo: baja la aprobación de Duque al 32% y crece el pesimismo
En un país tan presidencialista como Colombia, la sensación de que las cosas van por buen o mal camino, va de la mano con la calificación que las personas le dan al mandatario y a las instituciones. Por eso, en un contexto tan pesimista, a Iván Duque, a su gobierno y a otras instituciones del poder público tampoco les va bien.
De hecho, la popularidad de Duque es del 29 por ciento, la misma cifra que tenía en diciembre del año pasado. La imagen negativa, en cambio, pasó del 60 al 62 por ciento. Esta cifra de desaprobación solo es superada por la que tuvo el expresidente Juan Manuel Santos en 2013 y en el último año de su segundo mandato. Sin embargo, Duque no ha alcanzado un nivel tan alto de desaprobación como el de Santos (73 por ciento).
Según la medición, el 71 por ciento de los colombianos creen que las cosas van empeorando (un punto más que el resultado de mayo), mientras el optimismo baja en cuatro puntos en ese mismo período. Hace dos meses el 19 por ciento de los colombianos creían que las cosas iban por buen camino. Hoy lo cree el 14 por ciento.
Son varias las razones por las que el ambiente político no pinta bien. La primera de ellas tiene que ver con la percepción de que algunos problemas han empeorado. El empleo, el costo de la calidad de vida y la infraestructura son algunos de ellos. La percepción de que la economía va empeorando aumentó del 74 al 77 por ciento. Y eso se debe, a su vez, a hechos concretos. Según la Revista Dinero, el desempleo plantea tal vez el problema económico más urgente por resolver en Colombia. El deterioro del mercado laboral preocupa porque la tasa de desocupación completó cinco meses consecutivos en niveles de dos dígitos. Y, además, porque el aumento de los desocupados se produjo en medio de una menor tasa de participación. Es decir, el desempleo repuntó a pesar de que menos gente buscó trabajo durante los primeros meses del año.
La Gallup Pol refleja esta preocupación. El 80 por ciento de los encuestados cree que el desempleo está empeorando en el país, y solo un 9 por ciento que está mejorando, es decir el pesimismo creció tres puntos en este aspecto respecto a la medición anterior.
En materia de infraestructura, el tema también es complejo. El derrumbe de la vía a Villavicencio generó la sensación de que en este tema las cosas van de mal en peor y el pesimismo pasó de 38 a 54 puntos. Ese hecho también pudo haber motivado que temas como el costo de vida sigan siendo vistos con gravedad. La sensación de que todo está más caro subió diez puntos desde mayo, pasando del 79 al 89 por ciento.
