Por: Mario Arias Gómez
Una-. La guerra de la desinformación. Respecto a los ataques aéreos protagonizados durante la madrugada del 14 de abril, por Estados Unidos, el Reino Unido y Francia, aseguró Trump, que ninguno de los 103 misiles 
lanzados -que impactaron en sus blancos-, fue derribado por las defensas antiaéreas de Siria, lo cual dista de lo informado por los rusos, que señalaron que habían interceptado 71. Gracias a las cámaras de Google Maps , se pueden apreciar cómo lucían -antes y después- los puntos estratégicos atacados: Un laboratorio científico en Damasco, ligado a la producción de armas químicas y biológicas. Un depósito de armas químicas en Homs, y un depósito de producción y almacenaje de armas químicas, incluido un puesto de comando de las fuerzas sirias.
Dos-. El presidente Emmanuel Macron, sostuvo que las operaciones militares sobre Siria, fueron exitosas, lo cual no quiere decir que estemos en guerra. Maniobras que fueron necesarias, pues se había llegado a un momento en el que el bombardeo, era inevitable para devolver la credibilidad a la comunidad internacional». «Tuvimos éxito -continuó- en el plano militar; todos los misiles alcanzaron su objetivo; las capacidades químicas del régimen fueron demolidas. No hubo víctimas colaterales. ¿A quién creerle?
Tres-. Luego del último frenazo judicial al independientismo catalán, la marcha del sábado se consideró una nueva provocación a la legalidad, como los sucesivos intentos de sentar en la Generalitat, a quien tiene cuentas pendientes con la Justicia. Burdos desafíos al Estado, revestidos de apelaciones a la legalidad, la libertad de expresión y derechos de participación política que acorralan el derecho del resto de ciudadanos, a convivir pacíficamente en un marco legal estable, no sometido al asalto de unos oportunistas. Lo inconcebible en cualquier persona con cinco sentidos, es que un juez infrinja la ley y allane el camino de un presunto delincuente, hacia la reiteración en el plan de declarar la independencia en parte del territorio nacional.
Cuatro-. Kenji Fujimori, declaró ante la fiscal de lavado de activos, por la investigación seguida a su hermana Keiko, Repaso el que en febrero pasado, el exrepresentante de Odebrecht en Perú, declaró en Sao Paulo (Brasil), que la constructora entregó, 1 millón 200 mil dólares, como aporte a la campaña de Fuerza Popular, (su partido).
Cinco-. Confirmado, fueron cinco las visitas que Gerardo Sepúlveda -ex socio y empleado de PPK- hizo, siendo ministro de Economía, visitas que relacionan con los contratos obtenidos con Odebrecht, a través de dos empresas de su propiedad, Westfield Capital, y First Capital. La ex primera dama, Nancy Lange, socia de Latin America Enterprise Capital Corporation, fundada por PPK y Sepúlveda, pidió al Ministerio Público, reprogramar la citación pendiente, donde debe aclarar su relación con ella.
17/04/2018
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